Trastorno de Ansiedad Severa, Intolerante a la frustración, Sociópata en potencia.
Eso fue lo último que dijo mi Doctor...

martes, 8 de abril de 2014

E N V A S E S



“Estamos en plena cultura del envase. El contrato de matrimonio importa más que el amor, el funeral más que el muerto, la ropa más que el cuerpo, y la misa más que Dios.
La cultura del envase desprecia los contenidos”
Eduardo Galeano

Dormimos sobre una almohada que ya no anhela.
Hablamos de una boca que ya no piensa,
se nos ha vuelto un accesorio.
Nuestros pies ya no bailan,
zapatos que sólo circulan
y unos ojos,
unos ojos que ya no acarician el mundo:
simples pantallas de plasma sin proyección.
Somos entes inertes con horarios quebrados,
amantes pretenciosos del engaño,
escuderos paranóicos del tiempo.
Somos una asquerosa copia de un cliché televisivo,
una parodia agria y pobre de nuestros sueños.
Hemos perdido el contenido,
nos queda  sólo la cubierta
y al parecer a nadie le importa
a nadie le interesa.

A su brevedad



ALBA
Ella y sus cabellos de sándalo
con los que perfuma, y después...
tan solo expira.


ANCORA
no me muevas mar
que me desmoronas con tus caricias de espuma.


ANÓNIMA
Entre humos y recuerdos la dejo
 tal como el día que le encontré:
desconocida y libre.


ATRÁS
Yo a sus ojos, ella a él,
y quién persigue a quién,
¿o es  la imposibilidad la que nos vuelve tan románticos?.

Me enamoro todo el tiempo



Yo soy de las que se enamoran todo el tiempo, de todo, de todos, de nada y de nadie.
Me enamoro de las posibilidades: hombres altos, rubios, bajos, morenos, imaginarios.
 Me enamoro de mujeres, de mujeres reales y por reales hermosas;
me enamoro por segundos, por minutos y hasta por peligrosos días enteros;
me enamoro incluso de mí misma, de mi locura, de mi cinismo;
me enamoro del sol, de la luna, de los clichés.
Me enamoro de enamorarme
Y  aun así siempre me enamoro una vez más de ti,
pero bueno, ya sabes que yo soy
de las que se enamoran todo el tiempo.

Miscelánea

soledad el lugar comun de mis miedos.

No hay nada que de mas miedo que la intimidad.

Sabes que creeces cuando aprendes a estar contigo mismo.